- FONDA:
Descansamos todos los días en “La Rectoral”, en Taramundi. Presume de ser el lugar pionero en turismo rural de Asturias.
Se unieron dos casas en lo más alto de Taramundi, destinándose un módulo a la zona de huéspedes, habitaciones, gimnasio, sauna, biblioteca y salón común y el otro a la zona de recepción, cafetería y comedor. Tiene una terraza en el exterior para el verano con vistas espectaculares al valle y aparcamiento para clientes. Las habitaciones son amplias, con baño, dos camas y separación en forma de salita. Las superiores tienen un amplio ventanal con vistas impresionantes, que son lo mejor de la habitación y las inferiores terracitas en las que descansar.
La decoración está un poco indecisa, objetos antiguos, madera y tonos cálidos en las paredes junto a lámparas con apariencia de platillo volante, alfombras peruanas y cuadros sacados de una galería kitsch. Un poco chirriantes algunos contrastes, como la alfombra de pelo largo del dormitorio junto a los edredones estampados en múltiples colores o flores.
Y hablando de edredones, hacía frío. Tanto en la habitación, como en el comedor y en el salón común, el cual solo tenía un pequeño calefactor. Para dormir y no tiritar había que ponerse el colorido edredón y manta.
El desayuno, tipo buffet, estaba bastante bien, con café de máquina y tostadas de hogaza de pan, perfecto para comenzar el día. El zumo de naranja no era natural.
El sitio es agradable, acogedor y con unas vistas insuperables, deberían darle un pequeño giro a la decoración y subir la calefacción en determinadas fechas para hacerlo perfecto.
El importe por habitación y noche es muy variable, depende de la semana, el mes, el día, o el tiempo, la verdad es que no lo sé. El cuadro de precios es inmenso y confuso (47,00 € noche).
Fecha de visita: Septiembre 2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario